Deimantas Narkevicius desarrolla su obra principalmente en cine y
vídeo, aunque en ocasiones ha realizado también trabajos escultóricos.
El conjunto de su producción desarrolla con sutileza un tema
fundamental en las sociedades actuales: nuestra relación con la
temporalidad y la memoria.
La exposición que el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía ha
organizado sobre Deimantas Narkevicius (Lituania, 1964), en
colaboración con el Van Abbemuseum, Eindhoven y el Kunsthalle Bern, y
que se podrá ver hasta el 16 de febrero, es la más importante
que se ha realizado hasta ahora del artista en España. Comisariada por
Chus Martínez, reune diez películas que abarcan casi toda su
filmografía, desde Europe 54º25º19’ (1997) hasta The Head (2007). Además de películas -la mayoría en formato DVD salvo tres que
se proyectarán en 16mm-, se presentarán también algunas de sus
instalaciones.
En palabras de la comisaria de la exposición, Chus Martínez,
“aunque en sus películas la relación entre registro, memoria y
testimonio esté en primer plano, sería erróneo describir su trabajo
como documental. En las diferentes etapas que constituyen su obra
fílmica se constata que la historiografía es un ejercicio de
interpretación de imágenes y espacios, al tiempo que se nutre del
escuchar y el hablar"
La necesidad del artista de comprender la relación entre la memoria de
lo vivido y la memoria de lo imaginado, queda patente en trabajos
audiovisuales como Scena, Energy Lithuania y de un modo más radical en uno de sus últimos trabajos, Revisiting Solaris.
Desde el primer momento, el espectador está inmerso en una situación en
la que tiene que discernir entre pasados útiles de aquellos
descartables, al tiempo que uno cae en la cuenta de la importancia de
“recordar el futuro”, es decir, de producir un imaginario colectivo de
lo que está por llegar con plena conciencia de su potencial uso
político.